Hablar de hongos en las uñas, es hacerlo de una afección con un tratamiento difícil. Se trata de una infección que se encuentra incrustada en la uña, por lo que no es fácil conseguir alcanzarla.
Y es que a pesar de tratar la infección con éxito, la uña vieja necesita ser reemplazada por completo por una uña de nuevo crecimiento para considerarse totalmente curada.
En los casos que afectan a las uñas de las manos, esto puede llegar a tardar hasta seis meses después de que haya terminado el tratamiento. En el caso de las uñas de los pies, que crecen a un ritmo notablemente más lento, el proceso completo puede llegar a tardar incluso un año.
Es importante saber que cuanto antes se comience el tratamiento, mayores son las probabilidades de que se produzca una cura de la infección con éxito. Pero hay otras cosas que podemos hacer para poder curarlas, o incluso prevenir su contagio.
Llevar a cabo un cuidado adecuado de las uñas, mantener los pies frescos y secos, usar calzado amplio y cortar las uñas de manera regular son algunas acciones sencillas que ayuden a prevenir su recurrencia.
Los tratamientos para los hongos en las uñas requieren de paciencia, pero es vital que no se interrumpa el tratamiento sin haberlo consultado con un podólogo o médico.
Tratamientos para los hongos en las uñas
Se pueden usar tratamientos tópicos en los casos en los que la matriz de la uña no se haya visto afectada, pudiendo ser tratados con ungüentos, cremas o lacas de uñas antifúngicas.
También existe la posibilidad de llevar a cabo un tratamiento oral para los casos en los que el hongo se ha extendido a la matriz de la uña. Sólo se suele utilizar en los casos más graves y deben ser prescritos por un profesional médico.